La pandemia y la pospandemia ha hecho que nuestras casas se hayan convertido en el epicentro de nuestras vidas. Nuestra casa es nuestro hogar, nuestro lugar de ocio, nuestra oficina y, ahora, también nuestro gimnasio.
Instalar un gimnasio en casa es una tendencia creciente, ya que el estilo de vida saludable y el fitness se ha convertido en estilo de vida de gran parte de la población, por lo que muchas personas prefieren no ir a los gimnasios convencionales y adecuar un espacio en casa. Montar un gimnasio en casa aporta ventajas:
- Los gimnasios tienen un gran afluencia de personas y puedes encontrarte que las máquinas o materiales con los que quieras trabajar estén ocupados o tengan cola, mientras que en tu casa no tendrás este problema y tendrás toda la intimidad que quieras.
- Evitarás la pereza de tener que salir de casa o del trabajo y tampoco deberás preparar la bolsa con la ropa de deporte y los productos para la ducha.
- No tendremos que pagar una cuota mensual, vayamos o no al gimnasio. Solo deberemos hacer frente a la compra de material una única vez.
- Nosotros elegiremos cuando hacer ejercicio en nuestras casas y como. Podremos organizar nuestra rutina sin condiciones y sin desplazamientos.
Así puedes montar un gimnasio en tu casa
Podremos instalar el gimnasio en la misma habitación donde hacemos teletrabajo, en una habitación en desuso, en el párquing, siempre que sea privado, o en cualquier rincón de la casa. La sofisticación de nuestro gimnasio será proporcional al dinero que nos queramos gastar en él, pero necesitaremos los siguientes materiales:
- Entrenamiento cardio: Para que nuestra rutina sea 100% funcional y la podamos alternar con otros ejercicios, necesitaremos una máquina de cardio. Para ello, podemos escoger entre una cinta de correr, una bici estática, un rodillo o una elíptica, las hay de distintos precios y formas que elegiremos en función de nuestro presupuesto y espacio.
- Entrenamiento de fuerza: Los ejercicios con peso son una parte esencial de cualquier programa de entrenamiento. Utilizar la fuerza en los nuestra rutina incrementa la masa muscular, la potencia y la resistencia y mejora el aspecto de nuestros bíceps, tríceps y hombros, entre otros. Para ello podemos adquirir unas pesas en las que podamos poner distinto peso en función de nuestra evolución y necesidades.
- Ejercicios de musculación y repetición: Este tipo de rutina complementa nuestro entreno y podemos adquirir material para hacerlo o no. Estamos hablando de flexiones, abdominales, sentadillas, saltos. Para ello, podemos usar agarraderas de suelo, unas cuerdas para saltar a la comba, una banda elástica para tonificar o una rueda abdominal.
Si tu actual casa no crees que pueda albergar un gimnasio o crees que ha llegado el momento de cambiar de hogar, contactar con Organ y encontraremos la casa de tus sueños.