A lo largo de los años Sant Cugat ha ido forjando una imagen de ciudad tranquila, segura y verde. Pero más allá de estas tres virtudes, la ciudad destaca por otros aspectos que la hacen única y especial. Tanto si estás buscando un lugar para vivir o ya vives en Sant Cugat, descubre qué ventajas tiene vivir en ella.
1. Sant Cugat se sitúa en el Vallès Occidental y destaca por estar bien comunicada con Barcelona, con la que queda única para la Rabassada y los Túneles de Vallvidrera. La ciudad también está bien comunicada con las ciudades vecinas. Por el municipio pasan la AP-7, la B-30, B-16 y dispone de varias paradas de los Ferrocarriles de la Generalitat y una parada de la Renfe.
2. Es una ciudad media de 90.500 habitantes, por lo que dispone de todos los servicios de una gran ciudad y cuenta con un centro peatonal que permite el acceso de las personas al centro. Dispone de una red de carril bici que tiene la ciudad ayudan a una movilidad más sostenible.
3. Entre los servicios destaca la variedad de escuelas e institutos de calidad.
4. Cuenta con un tejido comercial cercano y de primer nivel, por lo que en la ciudad es fácil encontrar establecimientos de todo tipo: alimentación, ocio, restauración, moda, servicios... Además, dispone de 4 mercados municipales; los céntricos mercados del MercatVell y el de Torreblanca, y los otros dos, uno ubicado en el barrio de Volpelleres y el otro en el barrio de Mirasol. El Mercantic es otro de los atractivos de la ciudad y se ha convertido en un centro de referencia para los amantes de las antigüedades y objetos vintage, y está situado en las antiguas instalaciones de una fábrica de cerámica.
5. La ciudad dispone de grandes zonas verdes con grandes áreas infantiles, pero también espacios pensados para jóvenes.
6. Sant Cugat se encuentra rodeado de verde y destaca por su proximidad con el Parque Natural de Collserola, que ofrece contacto directo con la naturaleza. Más de 8.000 hectáreas protegidas, que ayudan a huir de la polución de la ciudad y desconectar ya sea caminando, corriendo, yendo en bici o haciendo un picnic.
7. El arte y la cultura son dos de los puntales de la ciudad. Y es que el municipio cuenta con el Museo de Sant Cugat con el Museo del Monestir y El Celler Cooperatiu; el Museo del Cómic; la Casa Museo Cay Gerrer y el Centro Grau Garriga de arte textil contemporáneo. Se suman a los museos varias galerías de arte, librerías, bibliotecas públicas y escuelas de danza y de música.
8. El legado arquitectónico del municipio también forma parte de sus atractivos. Entre los edificios singulares, destaca el Monestir, construido entre los siglos IX y XIV, y declarado Bien de Interés Cultural. La construcción se ubica en la plaza de Octavià, uno de los puntos neurálgicos de la ciudad. La ciudad atesora, además, un amplio patrimonio de arquitectura modernista, ya que a principios del siglo XX fue el lugar predilecto de la burguesía catalana para pasar el verano.
9. La población de Sant Cugat es bastante joven y familiar y goza de un alto nivel de formación, lo que la convierten con la ciudad con el índice de parados más baja de toda Cataluña. Además, es una de las ciudades más ricas de España al tener una de las rentas por cápita más altas del estado.
10. Finalmente Sant Cugat acoge centenares de entidades y asociaciones. El número de entidades del municipio es muy grande y cuenta con asociaciones deportivas, culturales, sociales y tradicionales.